Entre las muchas noticias que
pasan desapercibidas ante la avalancha informativa, hay una que merece una
mención. Esta mañana, 20 de marzo, a las 4:50 horas en la península y Baleares
tuvo lugar el cambio de estación y ha comenzado oficialmente la primavera.
Durará 92 días y 18 horas hasta concluir el 20 de junio.
¿Por qué el 20 y no el 21, como yo creía que era siempre? Supongo que porque este año es bisiesto. Pero no me voy a entretener comprobándolo.
En todo caso es primavera, lo cual es siempre esperanzador, porque reverdecerán los campos, eclosionarán las flores y resurgirá la vida. Y en nuestro caso concreto, también porque, así esperamos, irán subiendo las temperaturas paulatinamente, lo que debería ayudar a combatir al coronavirus.
Para celebrarlo, os invito a escuchar esta deliciosa interpretación de “La primavera”, de Vivaldi, en flauta dulce. La intérprete es la holandesa Lucie Horsch, una auténtica virtuosa de un instrumento musical muchas veces denostado y despreciado.
Cerrad los ojos. Ahora que estáis todos encerrados en casa, esta música os ayudará a transportaros a un campo lleno de flores y de pájaros. Y os hará un poco más llevadero el confinamiento este fin de semana.
Impresionante, ¿verdad? La mayoría de nosotros nunca hemos asociado la flauta dulce a la música clásica, solo a la tortura de las clases musicales infantiles. Sin embargo, hay conciertos enteros escritos para este instrumento, Siendo Vivaldi probablemente uno de los compositores que más obras desarrolló para flauta dulce.
Aquí, otra exhibición de Lucie Horsh, esta vez con acompañamiento de otros instrumentos.
Y ahora os confieso un pequeño
secretillo. Recientemente he adoptado el hobby de tocar la flauta. No puedo
presumir mucho todavía, ni llegaré jamás al virtuosismo de la amiga Lucie (ni
lo pretendo), pero me ha salido alguna cosa medio bien.
No voy a ser tan pretencioso como
para poner música mía por aquí. Si alguien tiene curiosidad, que pregunte.
Por lo demás, disfrutad la
primavera. En mi casa y en mi entorno seguimos sin novedad en el frente. Y eso, dadas las circunstancias, es una buena noticia.
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